El paisaje de Marojejy

El macizo de Marojejy se encuentra en el centro de una media luna de montañas y bosques que se extienden casi ininterrumpidamente entre Tsaratanana, al noroeste, y la península de Masoala, al sur. Es un país escarpado, con elevaciones que van desde los 75 m hasta la cima del pico Marojejy, a 2.132 m de altitud. En general, los flancos septentrionales del macizo se elevan a lo largo de pendientes relativamente suaves, y luego se rompen en los flancos meridionales en escarpadas paredes verticales de varios cientos de metros de altura.

Una alta cima acantilada surge de la niebla; en primer plano, árboles cubiertos de enredaderas y bañados por la luz del sol.
Ambatotsondrona

Toda la región de Marojejy se asienta sobre rocas del Precámbrico que formaron parte de la antigua masa continental llamada Gondwanaland. Hace aproximadamente 160 millones de años, las fuerzas tectónicas de la Tierra rompieron esta antigua masa de tierra, formando lo que hoy son los continentes de África, Sudamérica, Australia y la Antártida, así como el subcontinente de la India y la isla de Madagascar. Las rocas antiguas de esta zona son en su mayoría granitos y gneises, y gracias a su gran dureza y resistencia a la intemperie vemos hoy las altas montañas y escarpados acantilados de Marojejy.

El macizo de Marojejy alimenta dos grandes cuencas hidrográficas. Las vertientes septentrionales están drenadas por el larguísimo y caudaloso río Androranga, mientras que las meridionales forman parte de la cuenca del Lokoho. La cabecera del Lokoho está formada por las montañas que rodean la cuenca de Andapa, incluidos los macizos de Anjanaharibe-Sud, Betaolana y Marojejy. Tanto el Lokoho como el Androranga desembocan al este en el océano Índico.

El clima de Marojejy se define principalmente por los patrones de viento regionales y las lluvias que estos vientos transportan. Durante la estación más cálida, de noviembre a abril, los monzones del noroeste traen fuertes lluvias y ciclones periódicos. Durante la estación más fría, de mayo a octubre, los vientos del sureste traen lluvias ligeras y variables, con raras tormentas. En las zonas más bajas del parque, la precipitación media anual es de unos 2.243 mm (88 pulgadas).

La diferencia de temperatura entre las estaciones cálida y fría es escasa, al igual que la amplitud térmica diaria. El mes más caluroso es febrero, cuando la temperatura puede superar los 29º C, mientras que durante el mes más fresco, agosto, las temperaturas pueden descender por debajo de los 8º C. Sin embargo, las temperaturas varían considerablemente en toda la zona, disminuyendo en general a medida que se asciende en altitud. Asimismo, la pluviosidad en las laderas orientales es considerablemente mayor que en la sombra pluviométrica de las laderas occidentales.